Hola chicas! Como os comenté en
el anterior post, me voy a convertir en una auténtica Sherlock Holmes de
Deliplus.
En el capítulo de hoy, os
explicaré mis impresiones a cerca de unas
mascarillas que ya había visto antes en mi Mercadona habitual, pero que aún no
me había animado a probar.
Se trata de las mascarillas
faciales Fruit Fusion. Hay dos tipos: la ‘Limpiadora y Purificante’ de Cítricos
y la ‘Hidratante y Regeneradora’ de frutos rojos. En el post de hoy os
detallaré las características de ambas y os contaré mi experiencia con la de
cítricos. (La de frutos rojos me la reservo para cuando me note la piel más
seca, para ver si de verdad funciona).
Primero las características que
vienen en el envoltorio:
- La de frutos rojos: ‘Las propiedades de sus activos hidratan, regeneran y poseen una acción antioxidante dejando la piel del rostro hidratada y con una agradable sensación de confort’.
- La de Cítricos: ‘Las propiedades de sus activos limpian la piel, unifican el tono y aportan luminosidad dejando el rostro con una agradable sensación de confort’.
Precio: 1 € cada una.
Decidí probar la de cítricos
porque suelo maquillarme todos los días, y a pesar de que para quitármelo me
tomo mi tiempo (uso toallitas desmaquillantes para ojos y cara y después continúo
mi ritual lavándome la cara con el gel facial de Avène sin jabón) , siempre
queda algún ‘restillo’ que no se quita, por eso pensé que esta mascarilla con
las propiedades que promete, podría venirme muy bien.
Así que ahí va mi
experiencia:
En primer lugar, y siguiendo sus
instrucciones de aplicación, primero me lavé la cara y me la sequé. A
continuación me apliqué una capa gruesa y más o menos uniforme por toda la
cara, evitando ojos y boca (gasté el paquetito, por lo que a mi juicio, son de
un solo uso). Tengo que decir que el olor es riquísimo, me recordaba a los sugus
de naranja.
Cuando terminé, programé la
alarma del móvil para que me avisara en 10 minutos (quiero ser completamente
fiel a las instrucciones de aplicación del producto, sólo podré comprobar su
eficacia). Entre medias, nada más acabar de aplicarme la mascarilla, noté un
ligero escozor (no era excesivo, además no me preocupé porque no soy alérgica a
ninguno de los componentes que se indican).
Merece la pena
mencionar que la sensación que tienes mientras llevas la mascarilla puesta no
es como cuando usas una mascarilla con base de arcilla, que apenas te permite
gesticular. Para nada, en los 10 minutos que dura el proceso, la mascarilla no
llega a secarse del todo y la cara sigue manteniendo su elasticidad.
Cuando sonó la alarma, corrí al
baño y con una esponja y agua tibia, comencé a quitarme la crema. Salió súper
fácil. He leído en algunos posts, de otros blogs, que resultaba muy difícil
retirar el producto, pero os aseguro que si hacéis como yo y esperáis los 10
minutos reglamentarios, no os costará ningún esfuerzo.
Luego, cuando la eliminé del
todo, quité el exceso de agua con una toalla seca.
Lo mejor de la experiencia: la
sensación de después. Cara súper fresca y nada seca. Sí es cierto que como he
leído en otros sitios, aparecen brillos en la zona T, pero no son los típicos
brillos de exceso de grasa horribles. Son los brillos de cuando tienes la cara
súper limpia y lisa con los poros cerrados, que es normal que la luz rebote (principio físico,por todos conocido).
Pero vamos, este efecto se elimina fácilmente maquillándose encima.
Conclusión: ¿Las volveré a usar?
Sí. Una vez a la semana (que es lo que se recomienda el paquete).
Después del buen resultado de la
de cítricos me apetece un montón probar la de frutos rojos. Aunque tengo miedo
de que deje al ser hidratante se me quede la piel demasiado grasa.
¿Alguna la habéis probado y me
podéis informar? Espero que os haya gustado el post. Muchas gracias por leerme. Nos vemos pronto